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La iniciativa va dirigida a productores de berries que han resultado afectados por esta mosca que daña sus frutos, produciendo grandes pérdidas en sus cultivos.
En la comuna de Chimbarongo el Centro de Estudios Avanzados en Fruticultura, CEAF, realizó la primera jornada de difusión del Proyecto D- Shield: empaquetamiento tecnológico para el control de Drosophila suzukii, iniciativa apoyada por la Fundación para la Innovación Agraria, FIA, que busca desarrollar y validar un producto natural para el control de esta plaga.
Katerine Castro, encargada de proyectos del área de agronomía de CEAF, destacó que “esta jornada se realizó con un grupo de productores de berries, principalmente de arándanos, frambuesas y mora, que han tenido la presencia de esta plaga en sus cultivos, sobre todo en temporadas anteriores, los que han sufrido daños a nivel productivo. Nosotros les hemos dado algunas herramientas para identificar y enfatizar el monitoreo en sus campos”.
En la oportunidad, la ingeniera agrónoma dio a conocer las características de esta mosca y los daños que producía, así como también, se realizó un taller donde se les enseñó a trabajar con trampas comerciales para capturar los insectos, que fueron entregadas en la oportunidad. También se dio una muestra de trampa casera que los agricultores pueden replicar en sus huertos con material de reciclaje, las que deben ubicar en distintas áreas de sus predios para detectar la presencia de estos insectos en estado adulto. Esto les permite realizar manejos culturales y aplicaciones de forma oportuna.
Juliette Palma, Representante Regional de FIA en O’Higgins, señaló que «es un aporte a la innovación en la región, ya que el proyecto continuará su ejecución con la formulación de un repelente y/o insecticida que será desarrollado a partir de compuestos orgánicos derivados de aceite esencial de menta y tomillo. De este modo, se propone generar un manejo integrado para el control eficiente y sustentable de la plaga Drosophila suzukii, tecnología que será validada en cultivos de arándanos y frambuesas».
Miguel Salfate, productor de frambuesas del sector camino a San Juan de la Sierra, felicitó la iniciativa y expresó que “me parece muy bien que CEAF esté preocupado por esta plaga de moscas que ha llegado a los huertos y creo que para nosotros es un gran apoyo. Agradezco también al Gobierno Regional por esta preocupación que tiene con nosotros, ya que pienso que nos facilita mucho el poder mejorar nuestra producción y desarrollarnos mejor en nuestro quehacer agrícola”.
Adriana Amaro, jefa de la Unidad de Fomento de INDAP en O´Higgins, indicó que “me parece tremendamente positivo el trabajo que se está realizando. Creo que vamos en la vía correcta de unir las diferentes organizaciones públicas y privadas en beneficio de los agricultores, quienes se ven afectados directamente por esta plaga, la que es tremendamente perniciosa para la producción agrícola. Esta mosca afecta la calidad de la fruta y disminuye los rendimientos en los huertos, motivos por los que nuestros agricultores necesitan de este apoyo. Creo que este trabajo es fundamental para combatir esta plaga, aprender a convivir con ella, controlarla y beneficiar a nuestros productores”.
Productores
Delia Sepúlveda, manifestó que “hoy tuvimos una reunión en San Enrique donde pudimos aprender bastante de Drosophila suzukii gracias al CEAF que nos vino a dar esta charla. La verdad es que el año pasado me vi muy afectada con este tema de la mosca. Yo, como productora de berries, no tenía tanto conocimiento de esta plaga, pero gracias al CEAF pude aprender más y ahora me siento más preparada. Además, me hicieron entrega de trampas para poder controlar la mosca yo misma”.
Alex González, productor de frambuesas, “el proyecto me parece bastante interesante, ya que acá la mosca ha hecho bastante daño. La plaga se ha esparcido bastante y yo el año pasado fui muy perjudicado por la presencia de la mosca. Cuando uno está cosechando se da cuenta, ya que al tomar la fruta está muy blanda, prácticamente se revienta. Los frutos son como bolsas de agua, por lo que la pérdida es enorme, así que espero que con este apoyo logremos controlar la mosquita y no sufrir tanto daño”.
En la ocasión, los agricultores finalizaron con un taller práctico ejecutado por profesionales de la Universidad de O´Higgins, quienes se encuentran colaborando con el proyecto. Ellos están ayudando a entender la importancia de lograr controlar la existencia de esta mosca, lo que se materializará en un gran beneficio para los campos de berries en la región de O´Higgins.